La ciudad que nunca duerme…. cuándo me preguntan ¿Es bonito Nuevo York? Contesto no, entonces ¿Por qué te gusta? ¿Qué tiene? Siempre les digo lo mismo, “ No lo se, lo único que se, es que tardé mucho tiempo en ir porque no me llamaba la atención, conocía lugares como India, Thailandia pero la gran manzana no me atraía, me parecía una ciudad que no me podía aportar todas esas cosas que busco en un viaje: está claro que vería grandes museos, aglomeraciones de rascacielos, famosas estaciones de trenes y ¿Después? ¿Qué haría? ¿Estaría el resto de los días de compras? Pero aún así, un año decidí hacerle caso a mi hermana que es una enamorada de esa ciudad, cogí un avión no muy convencida de que me fuera a gustar esa fría ciudad que nombra sus calles con números.. Cuando me bajé del metro en la parada de Penn Station en la calle 34, sólo pude decir ¿Cómo no he venido aquí antes? Congelé esa imagen en mi retina para siempre.
Era una película constante, como dice Javier Reverte, «Sin el cine América no sería nada y New York no tendría espejos donde mirarse» , esa multiculturalidad única que se ve fundamentalmente en el transporte público me fascinaba.
Llevaba minutos en la gran manzana y ya sabía que si había una ciudad para volver, esa era New York.
Financial district, es una de las zonas más visitadas de Manhattan, aquí encontramos la intersección de Wall Street(st), con Broad.st. situándose tres de los más emblemáticos edificios de la ciudad, la Bolsa, la parroquia Trinity Church, que es la más antigua de la nación y donde muchos célebres están enterrados en su cementerio anexo y el Federal Hall que es donde George Washington fue investido presidente en 1789. Estas calles y sus alrededores son el centro de las finanzas de NY, encontramos el Federal Reserve Bank, el Chase Manhattan Bank, el New York Stock Exchange, etc. Aunque esta zona tiene muchos turistas, me encanta acudir aquí en un día de diario porque se puede ver a un gran número de ejecutivos frenéticos yendo de aquí para allá, representa la imagen que tanto hemos visto en las películas.
Muy cerca de allí está el World Trade Center, lugar donde se me encoge el corazón, estuve en la ciudad después de un año del trágico suceso, y recuerdo perfectamente aquel tremendo hueco que dejaron las Torres gemelas, hoy un complejo que te deja sin palabras, compuesto por el Mirador One World Observatory, 9/11 Memorial Plaza, el Memorial Museum, el Tribute Center, el FDNY Memorial Wall que es el homenaje a los bomberos, la Capilla St. Paul, la estación y el centro comercial Brookfield Place. Pese a que todo el mundo dice que es un lugar espectacular, no he visitado el museo, no me gusta sufrir gratuitamente y aún recuerdo ese día. En el centro comercial, edificio acristalado con unos jardines e incluso un embarcadero, están las más que conocidas hamburguesas de Shake, Shake, están muy buenas y son bastante económicas, y si es hora de merendar que mejor que una cupcake de Sprinkles, que hasta a los que no nos gusta el dulce nos cuesta renunciar. Me gusta mucho el túnel que une el World Trade Center con el Brookfield Place, y la iluminación por la noche es impresionante. En unas de las calles cercanas, está la gran pared donde la gente escribe sus condolencias, esto me llama mucho la atención, ya que la vez anterior que estuve en la ciudad, me encontré una pared donde las personas dejaban sus mensajes en pequeños papeles por el terrible suceso, y ahora otra vez, pero esta vez escritos en la propia pared… la verdad, reconozco que me impacta la gran cantidad de mensajes con tanto sentimiento…
Y como todo no puede ser penas, que mejor que darme una alegría entrando a la famosísima tienda Century XXI (22 Conrtlandt street) que está en frente de la Zona cero, es una tienda de ropa y complementos de firma a precios muy asequibles, vamos un outlet, donde aunque es un poco caos, nunca salgo con las manos vacías…
Me encanta pasear por una de las calles más chulas de este barrio y que a priori no parece estar ubicada en esa zona, es la calle Stone street, es tan particular, que se encuentra inscrito como Distrito histórico en el Registro Nacional de Lugares Históricos desde el año 1999. Es una calle de adoquines peatonal, llena de restaurantes y pubs con un fantástico ambiente.
Pasear por el paseo marítimo de Battery Park City, es un auténtico placer, lugar único paa contemplar la Estatua de la Libertad.
Existe un ferry que va a la estatua, pero a mi me parece que no merece la pena pagarlo, o a mi no me mereció en su día, lo que si que merece mucho la pena es coger el Ferry que va a State Island, pasa cerca de la estatua y es gratuito, y tanto de día como al atardecer hay unas vistas del skyline de Manhattan maravillosas, es una buena manera de ver la ciudad. El trayecto dura aproximadamente media hora, hay cada 15 ó 20 minutos durante el día y cada 30 minutos por la noche y los fines de semana. No hace falta comprar billetes, se coge en la Whitehall terminal y desde allí se traslada a la terminal de St. George, en Staten Island; mucha gente va y vuelve directamente sin salir de la propia terminal, es un paseo de lo más agradable y donde se pueden realizar bonitas fotos de la ciudad. La primera vez que estuve en New York presencié desde aquí unos impresionantes fuegos artificiales en conmemoración al 4 de julio, ese día en NY es increíble, desde las rebajas que hacen en sus tiendas, especialmente en Macy´s que por cierto es el patrocinador del castillo de fuegos artificiales que se celebra ese día en la zona de East River, hasta los eventos que hay para celebrar el día de su independencia, tales como pasacalles, conciertos, obras de teatro, etc. Ahora bien, si hay algo que sorprende ver el día del 4 de julio es el concurso de «devoradores» de perritos calientes de Nathan`s. A las doce de la mañana, veinte personas comen durante diez minutos perritos calientes a una velocidad impresionante en el cruce de las avenidas Surf y Stilwell en Coney Island.
Cerca de donde se coge el ferry también se puede visitar el Museo judío, la plaza de los Veteranos de Vietnam, el monumento nacional Castle Clinton y coger el ferry a la Isla de Ellis, la cual fue la aduana más importante de la ciudad, aunque ahora es un monumento al pasado y un museo donde se muestra la historia a través de fotos y voces de los emigrantes. Desde aquí también salen los taxis acuáticos que están todo el día transitando de un lado a otro.
A poca distancia se encuentra la zona llamada Seaport y Civic center (donde reside el gobierno de NY), aquí están todos los edificios públicos y aquí se encontraban los famosos periódicos en el siglo XIX, y la llamada “calle de las velas” por el gran número de veleros que se encuentran allí. Es una zona de edificios con una arquitectura espectacular. La conocida South street seaport, es la parte comercial de esta zona, hay muchas tiendas, cafes y numerosos veleros, me encanta el gran mirador donde se se pueden observar preciosas vistas al puente de Brooklyn y al East River. Aquí está el museo que consta de 12 edificios, está lleno de objetos y documentos relacionados con el mundo marítimo. Paralela a South street está Front street, econtramos el famoso “Cannon`s Walk” que es un edifico donde hay muchos cafés y un mercado al aire libre muy chulo. Aquí también se encuentra el Museo de la Policía (bajo de South street) que mola porque muestra ese mundo de la ciencias forense, huellas digitales, testimonios de arrestos de criminales famosos, etc, en el Salón de los Héroes hay un simulador de tiro. Además es muy chulo pasear por el Palacio de Justicia, el City Hall, la iglesia de Saint Paul (única iglesia construida antes de la Guerra de la Independencia) , el faro construido en memoria de los muertos en el hundimiento del Titanic.
Pero a mí lo que más me gusta es el puente de Brooklyn, conocido puente de acero de 1825 metros, y símbolo de la ciudad de NY, sin duda hay que atravesarlo andando sea la hora que sea (tiene dos niveles, el inferior con dos calzadas de tres carriles y el superior para uso peatonal y carril bici) , pero claro al atardecer son espectaculares las fotos que se pueden hacer desde un lado u otro. Si se cruza por la mañana hay que intentar que sea en fin de semana porque es cuando los neoyorkinos van a hacer volar sus cometas en el Brooklyn Bridge Park y es realmente chulo (a mi me chifla estar sentada en el parque de Brooklyn mirando al skyland mientras que veo a todos esos niños con sus cometas, a sus padres con sus portátiles y a sus madres con sus novelas) es una imagen digna de fotografiar, son esos momentos decisivos que no se anuncian donde tienes que sacar la cámara y empezar a disparar a todo, o bien, indicarles como posar.
A la hora de la comida es inevitable, comer en Grimaldi`s Pizza en el lado de Brooklyn , considerada como la mejor pizza de NY e incluso ha sido elegida entre las cinco mejores de EEUU (la verdad no se si será la mejor, no lo creo, pero lo que si es verdad es que es un sitio curioso) y muy chulo también el River Café desde donde se puede admirar la capital mundial del derroche.
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